Sistema de templado criogénico
Soluciones profesionales para ayudarte a alcanzar el éxito
Se ha afirmado que los tratamientos criogénicos de los aceros aleados aumentan significativamente su resistencia al desgaste y dureza mediante la interacción de tres efectos: una transformación martensítica de la austenita retenida completa, la precipitación uniforme de los carburos finos y la distribución de tensiones residuales. Estos tratamientos requieren equipos especializados que puedan enfriar materiales con nitrógeno a temperaturas que llegan a los -184°C (-300°F), y calentarlas a temperatura ambiente, o en algunos casos hasta los 650°C (1200°F) para el templado. Carburos Metálicos puede suministrar nitrógeno líquido para toda la gama de aplicaciones de templado criogénico.
Carburos Metálicos ofrece diversos servicios técnicos para procesos de tratamiento con nitrógeno criogénico. Nuestros ingenieros de aplicaciones pueden trabajar contigo para estudiar las necesidades de tus tratamiento criogénicos y de templado criogénico, y ayudarte a optimizar el uso de gases, respondiendo a las exigentes especificaciones de tus productos.
Contacta con uno de nuestros especialistas técnicos.
Aprovecha la experiencia de Carburos Metálicos en temple criogénico y suministro de gases criogénicos.
Pregunta al experto
Liang He
Ingeniero de I+D de procesamiento de metales, Norteamérica
"¿Por qué iba yo a querer tratar criogénicamente los aceros de las herramientas? ¿Afecta realmente a su microestructura?"
Después de austenizar y enfriar, los aceros para herramientas a veces se someten a un tratamiento en frío a aproximadamente –80°C (-112°F), seguido de templado. Se realiza el tratamiento en frío sobre todo para aumentar la resistencia, mejorar la estabilidad dimensional o de la microestructura y mejorar la resistencia al uso. Estos beneficios se consiguen gracias a la transformación de la austenita retenida en martensita. Algunos estudios demuestran que la reducción de la temperatura de tratamiento en frío por debajo de –100°C (–148°F) no mejora significativamente la transformación retenida de austenita a martensita, por lo que no ofrece beneficios adicionales. Por otra parte, hay estudios que demuestran que, en comparación con el tratamiento en frío (–80°C / -112°F), el tratamiento criogénico (–190°C / -310°F) aumenta la resistencia al desgaste.
ACTUALIZACIÓN DEL PROCESO DE TEMPLADO CRIOGÉNICO
Se ha afirmado que el tratamiento criogénico de las aleaciones de acero aumenta significativamente su dureza y resistencia al desgaste gracias a la interacción de tres efectos: completa transformación martensítica, precipitación uniforme de carburos finos y transmisión de las tensiones residuales.